Distribuimos productos de los líderes del mercado de automoción y maquinaria. Productos que aunan la tradición de diseños altamente probados con la innovación de nuevos materiales.
El aire que “respira” el motor contiene una serie de partículas de polvo en suspensión que se pueden cifrar entre 1 y 30 mg/m3, dependiendo del estado de la carretera. Puesto que un motor pequeño puede “tragar” del orden de 3000 litros de aire por minuto, si no estuviera protegido pasarían al interior de los cilindros hasta 10 gramos de polvo cada hora. Por ello se utilizan los filtros de aire, que en el mejor caso alcanzan un 99 por ciento de eficacia, pues ninguno es capaz de evitar por completo que partículas tan minúsculas pasen al interior del motor. Síntomas de un filtro de aire en mal estado:
Se trata de un órgano vital en el funcionamiento del motor, pues retiene las partículas abrasivas que no consigue detener el filtro del aire, así como partículas metálicas procedentes del desgaste de piezas móviles en contacto. También elimina los productos resultantes de la combustión que logran pasar al cárter, y las sustancias que se producen durante la propia degeneración del aceite. Suelen estar fabricados de un papel fibroso especial con una base de celulosa, algodón o materiales sintéticos.
El mal estado de un filtro de aceite no se puede detectar con medios simples por lo que se debe realizar su sustitución de forma periódica. Se recomienda cambiar el filtro de aceite cada vez que se cambie el aceite del motor.
Los filtros de combustible se utilizan para proteger el sistema de combustible del vehículo contra suciedad, óxido, incrustaciones y contaminantes de agua que pueden taponar o desgastar los carburadores e inyectores de combustible y causar un rendimiento deficiente y un fallo del motor. Síntomas de un filtro de combustible en mal estado:
La contaminación es la principal causa de fallo en los sistemas de lubricación e hidráulicos. Unos fallos que pueden dar lugar a periodos de inactividad, sustitución de componentes y fluidos, así como a mayores gastos de mantenimiento. Los filtros hidráulicos protegen eficazmente de la contaminación, asegurando la fiabilidad de sus sistemas y componentes hidráulicos.
Un filtro de aceite tiene, durante toda su vida útil, la misión de mantener alejados del circuito de aceite los materiales y partículas no deseados. Y tras haber cumplido satisfactoriamente con su misión, él mismo será extraído y habrá que desprenderse de él. Lo ideal es que esto sea posible en una pieza y sin una costosa gestión de residuos.
La solución acorde con los tiempos que corren, respetuosa con el medio ambiente, se llama pues: filtro de aceite ecológico. Este se compone de dos partes:
Los filtros de habitáculo realizan un trabajo limpio: Durante un viaje de una hora de duración entran en el habitáculo del vehículo hasta 100.000 litros deaire. Si el filtro de aire de habitáculo está obturado o se avería por completo, la concentración de sustancias dañinas en el habitáculo del vehículo puede ascender a unos valores seis veces superiores a los existentes en el aire que se aspira al borde de la carretera.
Los filtros de aire de habitáculo suministran al conductor y a los pasajeros, incluso en caso de polución urbana o polen, aire respirable filtrado de forma fiable y, de este modo, aseguran la salud, el bienestar y la plena capacidad de concentración del conductor. Estos filtros también descargan al ventilador, protegen la calefacción y el aire acondicionado contra la suciedad, mejoran la circulación del aire e impiden el peligroso empañado de los cristales. Además, los cristales de los instrumentos y el tablero permanecen limpios durante más tiempo.
Síntomas de un filtro de habitáculo en mal estado:
Distribuidores Oficiales de: